Cultura Inca | Etimología - Origen y Características

La Cultura Inca o incaica, también conocida como civilización Inca, fue una de las culturas precolombinas más resaltantes de la historia. Asimismo, hasta la fecha se la conoce como uno de los imperios de mayor poder en la historia de Sudamérica.

El apogeo de la Cultura Inca se dio entre los siglos XV y XVI. Durante este tiempo se consolidó la organización política que dio lugar al Estado, Tahuantinsuyo o Imperio Inca.

A diferencia de otras culturas relativas a su tiempo, los Incas poseían conocimientos avanzados en su época. Además, gozaban de gran ingenio lo cual les permitió crear tecnologías, que más tarde les sirvieron para alzar los majestuosos monumentos de este Imperio.

Aunque fue la última civilización de su tipo en desarrollarse, la Cultura Inca permaneció como un Estado independiente. A razón de esto, durante el periodo de la Conquista, este imperio no perdió demasiado de su fuerza.

La síntesis de los conocimientos ancestrales que tuvieron las autoridades máximas del Imperio Inca los llevaría a expandirse a lo largo de Sudamérica. En este sentido, incorporaron pueblos de los siguientes países: Perú, Bolivia, Ecuador, Chile y Colombia. Siendo Perú el epicentro de la Cultura Inca, lugar de la emblemática ciudad de Cuzco, capital de esta cultura.

De acuerdo con los expertos, la Cultura Inca, a pesar de ser un Imperio no tendría como sistema político una monarquía de tipo socialista. Al contrario, el Imperio Inca se caracterizó por ser un Estado fuerte, basado en una economía recíproca y complementaria.

En la actualidad, el legado de esta asombrosa cultura precolombina se resguarda en pequeñas comunidades indígenas esparcidas por Sudamérica.

Etimología

En cuanto al idioma que se manejaba dentro de la Cultura Inca, el quechua era la lengua predilecta de esta civilización. No obstante, existían distintos dialectos y variedades de esta y otra lengua que se hablaban en diferentes regiones pertenecientes al Estado Inca.

A razón de esto, el nombre que se le dio al Estado o Imperio Inca, es decir, Tahuantinsuyo es un término procedente del quechua. También denominado como ‘Inkakuna’ entre los Incas del norte del Perú, lo cual se puede traducir al español como: Confederación de los Incas.

Otro de los nombres con el que utilizaban los Incas para referirse al estado era Tawantinsuyu. Una de las variaciones del nombre original en lengua quechua, que puede traducirse como “Las Cuatro Partes”.

En cuanto a este nombre, el significado de este proviene de la expansión y posterior unificación de todas las regiones que comprenden la Cultura Inca.

Origen de la Cultura Inca

El inicio de la Cultura Inca tuvo lugar en el siglo XII d.C. en el valle de Cusco, a manos de un par de familias. Durante los primeros años, se piensa que estas familias procedentes de la Cultura anterior Tiahuanaco, escogieron las tierras de Cuzco como un refugio.

No obstante, la civilización pre-incaica no comenzaría sino tiempo después, gracias al constante desarrollo de pequeñas tribus por la región. Estas tribus fueron las que más tarde llegaron a consolidar el Estado multicultural precolombino de Tahuantinsuyo.

Ahora, al ser los primeros pobladores del área, hicieron de Cuzco el epicentro de toda la unificación, el cual fue el hogar de miles de incas.

Por otro lado, se tiene la creencia de que los primeros pobladores de esta civilización habrían llegado desde Oceanía, específicamente de las islas Polinesias.

Esta creencia surge como resultado de ciertas similitudes encontradas en restos arqueológicos de este lugar. Inclusive, en Polinesia se habla de una leyenda en la que describen la llegada de la Cultura Inca a sus tierras.

Ubicación geográfica de la Cultura Inca

En cuanto a la ubicación geográfica, la civilización Incaica se fortaleció en las tierras pertenecientes al centro-oeste de Suramérica. Hoy en día, dicho territorio comprende regiones de países como Perú, Ecuador, Bolivia, Colombia y Chile.

Esta zona fue escogida por los Incas, ya que contaba con las condiciones edáficas y climáticas propicias para el desarrollo de la civilización. Los Incas principalmente buscaron establecerse al piedemonte de la cordillera Andina y la región costera por la diversidad ecológica que proveían ambas zonas.

Expansión de la Cultura Inca

El mayor logro que comprendió la Cultura Inca fue la consolidación de su expansión, la cual se realizó en tres etapas sucesivas. Tal como cualquier otro Imperio, el crecimiento del Imperio Inca se daría a razón de la imposición del dominio sobre las tierras.

Los primeros pasos al desarrollo del Imperio Inca tuvieron lugar entre los años 1438 d.C. hasta 1525 d.C. Para entonces, dos poderosas tribus situadas al sureste de Cuzco, en conjunto con los quechuas y los chancas, iniciaron la ocupación del territorio.

A razón de las similitudes culturales y el uso del mismo lenguaje, estas tribus convergieron para dar paso a la primera etapa de la expansión.

Primera expansión y consolidación. Ocurrió gracias al segundo y tercer gobernante Inca, Sinchi Roca y Lloque Yupanqui respectivamente, ambos Sapa Incas.
Segunda expansión. A manos de los gobiernos de Mayta Cápac, Cápac Yupanqui, Inca Roca, Yáhuar Huácac y Viracocha Inca.
Tercera y última expansión. En cuanto a esta etapa, la misma estuvo a cargo de Pachacútec Inca Yupanqui, también conocido como el gobernante más grande de la Cultura Inca. Asimismo, la expansión continuó durante los gobiernos de Túpac Inca Yupanqui y Huayna Cápac Inca Yupanqui.

Cabe destacar que la razón principal del florecimiento de la Cultura Inca, se dio gracias a que sus gobernantes fueron los primeros estadistas de Suramérica. Por consiguiente, el pueblo Inca gozaba de beneficios y derechos. Gracias a que no existían los abusos humanos, no hubo mayores movimientos sociales en contra del Estado.

Organización Política de la Cultura Inca

Tal como en otros aspectos, la Cultura Inca tuvo una organización política adelantada a la época precolombina. Aunque se trataba de una monarquía, los gobernantes daban prioridad a las necesidades del pueblo, es decir, a los súbditos. Los incas tuvieron una de las organizaciones políticas más avanzadas de toda la América precolombina.

Una de las particularidades de la monarquía que manejaban los Incas, era la aplicación de una diarquía. Es decir, existían dos autoridades o monarcas al mando. En este sentido, se tiene lo siguiente:

Cuzco Alto. También denominado Hanan Cuzco, su cargo comprendía el control de los elementos cívicos, políticos, económicos y las fuerzas militares.
Cuzco Bajo. También conocido como Harin Cuzco, su cargo se fundamentaba en el poder de los sumos sacerdotes. Además, tenía voto en ciertas decisiones imperiales.

Del mismo modo, los cargos que comprenden la estructura jerarquizada de la nobleza del Imperio Inca eran los siguientes:

Auquis. Se trataba del príncipe heredero, el cual era escogido de acuerdo con sus méritos y no por herencia.
Tahuantinsuyo Camachic. Se refiere al Consejo Imperial, compuesto por cuatro gobernantes cada uno correspondiente a su región, las cuales eran: Chinchaysuyo, Kuntisuyu, Antisuyu y Collasuyu.
Apunchic. Se refiere al cargo de los gobernadores que poseían, los gobernadores, con capacidades político-militares.
Tucuirícuc. Por su traducción al español, “El que todo lo ve”. Este cargo era similar al de un supervisor Imperial al mando de distintos funcionarios de cada región, por tanto, tenía gran autoridad.
Curacas. La labor de estos era similar a la que tendría un cacique, también se lo podía interpretar como el jefe de una comunidad.

Organización Social de la Cultura Inca

La organización social de la Cultura Inca se basaba en un orden piramidal, siendo la base de la pirámide el Ayllu, equivalente a una comunidad. Por otro lado, se distinguían distintas clases sociales a partir de los niveles de jerarquización en la pirámide.

En este sentido, la sociedad quedaba acomodada de esta forma:

Nobleza. En este estrato social se agrupaban personas ilustres, héroes y sacerdotes de las comunidades. Asimismo, este grupo comprendía una subdivisión comprendida por: La Realeza o Corte Imperial, Los Nobles de Sangre y Los Nobles por privilegio.
Pueblo. En cuanto a este estrato, al mismo corresponden los ciudadanos comunes que desempeñaban labores agrícolas o vinculadas al comercio. Obedeciendo a la condición u oficio que llevaban a cabo se los llamaba de una forma en particular:
Hatunrunas, los agricultores. También, estaban los Pinas que eran esclavos sometidos a realizar labores agrícolas.
Mamaconas, eran las mujeres a cargo de la producción de textiles.
Mitmakunas, nombre designado a los hombres que contribuyeron a la expansión.
Yanas, se trataba de los prisioneros de guerra.
Pampayrunas, eran mujeres esclavas sometidas a ejercer la prostitución.

Características de la Cultura Inca

La Cultura Inca estaba comprendida por un pueblo con gran iniciativa. Gracias a esta cualidad en conjunto con sus conocimientos en distintas áreas lograron fortalecerse hasta convertirse en el Imperio que pasó a la historia.

A continuación, te resumimos las características más sobresalientes de la Cultura Inca:

Arquitectura

La arquitectura Inca es única en su tipo, debido a la pulcritud y simetría de sus edificaciones, características que resultan avanzadas para las culturas precolombinas.

Por otro lado, en los elementos arquitectónicos de los incas destaca la solidez de sus estructuras. Asimismo, resalta la sobriedad en el diseño de las edificaciones, ya que en su mayoría serían construidas a base de piedras lisas.

Los incas construyeron sus civilizaciones basándose en una estricta planificación territorial, gracias a esto sus edificaciones eran altamente funcionales.

Por un lado, las construcciones destinadas al pueblo eran más simples, no obstante, se mantenía la finura en el ensamblado de cada vivienda. Por otro lado, los edificios que correspondían a la administración y los templos fueron trabajados de forma más rigurosa para crear complejos monumentos.

Asimismo, la arquitectura inca se dividió en tres momentos fundamentales. Respecto a ellos, se destaca el avance y la aplicación de otras técnicas para mejorar la estabilidad y el aspecto de sus obras:

El ciclópeo (momento de las grandes piedras).
El poligonal (momento de las piedras angulares).
El imperial (en este momento las piedras volverían a una forma más simple, rectangular o cuadrada).

El legado de la meticulosa arquitectura Inca se puede ver reflejado en la ciudad de Cuzco, la cual fue capital de esta cultura. Asimismo, se pueden destacar lugares como Sacsayhuamán y el Coricancha y Machu Picchu.

Economía

Así como otras culturas de la época, la base del sustento y de la economía de la Cultura Inca era la agricultura. Las labores agrícolas eran asignadas de acuerdo con la edad de las personas.

Por otro lado, a los Incas se les atribuye una habilidad nata para el cultivo, puesto que cultivaron variedad de especies vegetales. Por ejemplo: maíz, papa, camote, tomate, maní, palta y frijoles. Asimismo, los Incas aprovechaban la fertilidad y el agua al tener un sistema de cultivo por terrazas.

Otras labores de gran importancia, era la producción y elaboración de textiles a partir de materia prima como el algodón y la fibra del maguey.

La ganadería y la pesca eran labores económicas complementarias de la Cultura Inca, más que nada se centraban en la cría de Alpacas.

También, practicaban el intercambio o trueque con otras culturas y pueblos colindantes, de esta manera obtenían otros materiales valiosos. Se cree que la red comercial que tenían los Incas pudo haber llegado hasta Panamá y Costa Rica.

Literatura y conocimientos matemáticos

Según expertos investigadores, el Imperio Inca dio indicios de haber manejado una literatura propia, basada en la lengua quechua. En este sentido se tenían dos corrientes:

La literatura cortesana: la cual era manejada por las autoridades o profesores conocedores de la misma, se considera la literatura original.
La literatura popular: nombrada de este modo, ya que tendría su origen en el pueblo.

Ahora, respecto a las matemáticas, este sería otro aspecto destacable de la Cultura Inca, puesto que conocían el sistema decimal. Asimismo, sabían aplicar este y otros fundamentos físicos y matemáticos para consolidar la construcción de sus civilizaciones.

Religión

La religión de la Cultura Inca estaba basada en el politeísmo. Conjuntamente sus creencias comprenden una variedad de ritos espirituales asociados a festividades propias de la cultura.

Entre sus principales dioses podemos mencionar:

Pachamama. La Diosa madre, vinculada a la fertilidad y a la tierra.
Pachacámac. El Dios asociado a la fecundación de la tierra y los cultivos, también se le atribuía el poder de provocar los sismos.
Wiracocha. Un Dios representativo de la nobleza.
Inti. Era el nombre que le daban al Sol como Dios.
Apus. Eran las deidades asociadas a las montañas.

A lo largo de su desarrollo, los Incas tendrían también como dioses a los astros, por tanto, pensaban en el Sol como una deidad. Asimismo, los fenómenos astrológicos tendrían gran relevancia en cuanto a sus rituales y eventos de carácter religioso.

Por otro lado, la percepción de los Incas respecto al mundo fue bastante compleja, puesto que creían en las fuerzas que mueven al universo. Claro que, estas creencias también estarían relacionadas a habilidades como la adivinación.

No obstante, durante y después del periodo de conquista, el intercambio cultural ocasionó que ciertas creencias religiosas de los Incas fueran erradicadas. Asimismo, se adoptaron los dogmas del catolicismo, en algunos casos siendo vinculados a la religión de la civilización Incaica.

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